Eldborg es uno de los topónimos más repetidos en Islandia. No debería extrañarnos, pues su traducción al español sería «Castillo de Fuego». Una forma poética de referirse a un cráter en erupción. Aunque no todos los antiguos volcanes que reciben este nombre han erupcionado en época historia. El que visitaremos en esta entrada, lo hizo al menos 4.000 años antes de la llegada del primer escandinavo a las costas de la Tierra de Hielo.

Camino de Eldborg

Camino de Eldborg.

Había finalizado mi tercer periplo invernal por Islandia visitando otro Eldborg. En concreto, Eldborg við Geitahlíð, en el sur de la península de Reykjanes. Parecía una buena idea comenzar el cuarto visitando el más famoso de todos los Castillos de Fuego islandeses. En concreto, Eldborg í Hnappadal, en Snæfellsnes. Entre recoger el coche de alquiler, dar un breve rodeo por el suroeste de Reykjanes, atravesar la periferia de Reikiavik y recorrer los 105 kilómetros que separan la capital de Islandia de la granja de Snorrastaðir, tarde más de 4 horas en llegar a su aparcamiento. A las dos de la tarde, comenzaba a recorrer la senda, de apenas 3.000 metros, que separa la granja del cráter.

Camino del Eldborg

El camino en 2022.

No era mi primer intento de visitar Eldborg. Dos años antes, la acumulación de nieve y la proximidad de un temporal invernal me habían hecho desistir a mitad de camino. Al año siguiente, había tanta nieve en el campo que ni lo intenté. A la tercera, parecía tenerlo todo de cara. Había mucha menos nieve, la senda estaba llena de huellas, marcando claramente el camino a seguir, y la tarde era espléndida. Con cuatro horas de luz por delante, parecía difícil fallar.

Avanzando hacia el cráter

Avanzando hacia el cráter.

Eldborg parece tener su origen en una erupción explosiva, que tuvo lugar entre 5.000 y 9.000 años atrás. La erupción expulsó a la atmósfera lava muy viscosa que, al caer, no tardó en solidificarse, dando lugar a un cráter asombrosamente simétrico. Algo muy poco común en Islandia. En algunos lugares, leerás que hubo una segunda erupción, en época histórica, mencionada en el Landnámabók. Se trata de un error. Hoy sabemos que dicha erupción se produjo en Rauðhálsar. Otro de los volcanes del valle de Hnappadalur, en el sistema volcánico de Ljosufjoll (las Montañas de la Luz).

Fagraskógarfjall

Fagraskógarfjall.

Me llevó algo más de una hora llegar a la base del cráter. En parte, por la acumulación de nieve en el campo, que era mayor de lo que en principio podía parecer. Aunque, todo hay que decirlo, la temperatura era baja y la nieve estaba bastante dura, por lo que era posible andar sobre su superficie con relativa comodidad. En realidad, lo que más me entretuvo fue el hermoso paisaje que recorría. Un paisaje dominado hacia el este por el monte Fagraskógarfjall. Su nombre, cuya traducción sería la Montaña del Bosque Hermoso, lo dice todo.

En la ladera del Eldborg

En la ladera del Eldborg.

La subida al cráter era un tanto abrupta. Afortunadamente, llevaba crampones y bastones de senderismo. Además, en los tramos más complicados, una cadena metálica ofrecía un conveniente punto de apoyo. Apenas tardé diez minutos en realizar la ascensión, de los cuales empleé la mitad fotografiando las extrañas formaciones que había en la ladera.

En la cresta del cráter

En la cresta del cráter.

Una vez en la cresta del cráter, tan solo era posible moverse por un espacio limitado. En parte, es por tu propia seguridad, pues la zona tiene cierto nivel de riesgo, sobre todo en invierno o si hay vientos fuertes. Pero también por la preservación del entorno. Aunque, al menos de momento, no parece ser uno de los lugares más populares de Islandia, si cada visitante a Eldborg se dedicase a caminar libremente, no tardaría mucho en deteriorarse. Como siempre, hay que recordar que la naturaleza de Islandia es extremadamente frágil. Aunque no lo parezca.

El interior del cráter

El interior del cráter.

El cráter se eleva aproximadamente 60 metros sobre Eldborgarhraun, el campo de lava circundante, fruto de la misma erupción que dio origen al cono. Éste tiene una profundidad de 50 metros y, aunque aparenta ser un circulo casi perfecto, en realidad su forma es ovalada, con 250 metros de longitud y 180 de anchura.

Vista hacia el este

Vista hacia el este.

Eldborg es parte del cinturón volcánico de Snæfellsnes. Un complejo que, al contrario que la mayor parte de los que atraviesan Islandia de suroeste a noreste, no se encuentra en la zona de divergencia entre las placas norteamericana y euroasiática. Forma una linea prácticamente recta, cuyo extremo oriental es el Grábrók, 36 kilómetros al este de Eldborg. El occidental, 69 kilómetros hacia el oeste, sería la hermosa cumbre del Snæfellsjökull. Uno de los volcanes más famosos y reconocibles de la Tierra de Hielo.

Eldborg desde Snorrastaðir

Eldborg desde Snorrastaðir.

Tras media hora disfrutando de las espléndidas vistas, llegó la hora de comenzar el regreso. Otra vez tardé más de lo previsto en completar el camino. El paisaje, un despiste que me hizo dar un rodeo y unas huellas en la nieve, quizá de un zorro ártico, acabaron entreteniéndome. Pero el atardecer avanzaba y aún tenía un par de tareas pendientes en las inmediaciones de Eldborg.

Eldborg desde el aire

Eldborg desde el aire.

La primera era volar el dron. Eldborg es un espacio protegido y hace falta pedir permiso para sobrevolarlo. Aunque no lo tenía, sin entrar en la zona vedada pude lograr una panorámica lateral del cráter y su entorno, en la que es posible apreciar alguno de los conos menores que lo acompañan. Según los geólogos, la erupción que dio origen a Eldborg se produjo en una fisura con 5 cráteres y una longitud de 1.000 metros.

Eldborg al atardecer

Eldborg al atardecer.

Después, con la hora dorada adueñándose del paisaje, avancé unos metros con el coche rumbo a Snæfellsnesvegur. Había estado haciendo fotografías desde el mismo lugar prácticamente un año atrás. Pero ahora tenía mejor equipo y, sobre todo, unas condiciones de luz óptimas. La hermosa pirámide del Skyrtunna, con sus laderas teñidas de salmón por los últimos rayos del sol, se elevaba sobre la silueta del Eldborg. Por una vez, logré cumplir los tres objetivos que me había marcado para aquella excursión. En Islandia, no es lo habitual.

Travelers' Map is loading...
If you see this after your page is loaded completely, leafletJS files are missing.

Para ampliar la información.

En https://www.viajablog.com/como-hacer-trekking-crater-de-eldborg-islandia/ describen la ruta en verano.

También se puede consultar la entrada sobre la ruta en AllTrails: https://www.alltrails.com/es/ruta/iceland/western/eldborg-crater.

En inglés, hay un artículo sobre el cráter en Guide to Iceland: https://guidetoiceland.is/travel-iceland/drive/eldborg.

En el canal de YouTube de Mads Peter Iversen hay un video con unas hermosas tomas aéreas: https://www.youtube.com/watch?v=5pzXrn-XbAs.