Tras una interesante navegación por el Eyjafjörður, atracamos en Akureyri a las diez de la mañana. Habíamos reservado un coche de alquiler, por lo que desembarcamos lo mas rápido posible y nos acercamos a la agencia, situada a escasos metros del puerto, a recoger el vehículo. A las 10:20 ya estábamos listos para arrancar con la excursión del día.

Era nuestro primer día en Islandia. Nuestro plan era tomárnoslo con relativa calma, ya que habíamos oido casi de todo sobre las carreteras del país. Al final, no era para tanto. Es cierto que no cunden y hay que ir con relativo cuidado. Pero, al menos las carreteras que nosotros hicimos, tienen buen trazado y están bien mantenidas. El principal peligro es el paisaje: es fácil embelesarse con la belleza del entorno y salirse del carril. En nuestro primer día, tuvimos un buen susto con una furgoneta que se despistó y casi nos embiste frontalmente.

Reflejos en el lago Mývatn

Reflejos en el lago Mývatn.

Nuestro primer destino era la cascada de Goðafoss. Tardamos aproximadamente una hora en recorrer los 52 kilómetros que la separan de Akureyri. En parte porque había un tramo en obras. Tras la visita a Goðafoss, salimos rumbo a Hverir. No teníamos previsto detenernos por el camino, pero fue imposible evitarlo. La Ring Road, como popularmente se conoce a la carretera nº 1, bordea el lago Mývatn por el oeste. La desolada belleza del entorno fue irresistible. A pesar de estar recorriendo la principal ruta turística del país, íbamos virtualmente solos por la carretera. Las aguas del lago estaban prácticamente inmóviles, reflejando las caprichosas formas de las nubes que cubrían el cielo. El silencio era casi absoluto, únicamente roto por algún coche que pasaba ocasionalmente. Tuvimos que hacer un esfuerzo para reanudar el camino.

Akureyri desde la orilla oriental del Eyjafjörður

Akureyri desde la orilla oriental del Eyjafjörður.

Acabamos haciendo otras dos breves paradas. La primera, en el Centro de Visitantes de Mývatn, en el pueblo de Reykjahlíð. La segunda en el mirador del paso de Námaskarð, un poco antes de llegar a Hverir. Tras visitar Hverir, iniciamos el regreso a Akureyri, esta vez bordeando el lago Mývatn por el lado este. El rodeo nos sirvió para hacer la última visita del día: las interesantes formaciones volcánicas de Dimmuborgir. Tras la visita, bordeamos el lago por el sur y nos reincorporamos a la Ring Road. Esta vez tuvimos mas suerte con el tramo en obras, en el que no perdimos apenas tiempo. Aprovechamos para hacer una breve parada en un pequeño mirador frente a Akureyri. Disfrutamos de la hermosa vista de la ciudad, ubicada al otro lado del fiordo y enmarcada por montañas en las que aun había restos de nieve.

Jardín botánico de Akureyri

Jardín botánico de Akureyri.

Al final, llegamos a Akureyri un poco mas tarde de lo previsto. A pesar de lo cual, aún nos sobró algo mas de una hora para hacer un pequeño recorrido por la ciudad. Aprovechando que teníamos coche, nuestro primer destino fue el jardín botánico, el mas septentrional del mundo. El jardín aprovecha el relativamente cálido clima de la ciudad, protegida por las montañas circundantes, para albergar cerca de 6.600 tipos de plantas exóticas. A la belleza del lugar se unen las hermosas vistas sobre la ciudad y el fiordo, haciendo del jardín un destino bastante popular.

Iglesia de Akureyri

Iglesia de Akureyri.

Nuestra siguiente parada fue en la iglesia de Akureyri. En una ciudad escasa en edificios singulares, la iglesia luterana, construida en 1940, quizá sea la construcción mas emblemática del lugar. Al menos, su inconfundible silueta es visible desde buena parte de Akureyri. Pero, en mi opinión, no merece la pena visitarla. Nuestra siguiente parada fue en el mirador que hay junto al Monumento a los Pioneros, en la calle Brekkugata. Tampoco fue muy buena idea. Aunque originalmente parece que ofrecía una espléndida vista sobre el Eyjafjörður, ésta ha sido desvirtuada por los edificios construidos recientemente, que afean buena parte del panorama.

Tramo final del Eyjafjörður

Tramo final del Eyjafjörður.

Tras dos relativos fracasos, decidimos que iba siendo hora de devolver el coche y, en todo caso, dar una vuelta por el muelle. Una vez en el puerto, estuvimos sopesando dar un último paseo andando hasta el centro de la ciudad, que estaba relativamente cerca. Pero estábamos bastante cansados después de la intensa y fructífera jornada. Además, nos esperaban tres días consecutivos en Islandia, en los que el ritmo iba a ser similar o incluso superior, por lo que al final decidimos no forzarnos demasiado. Subimos al barco, con la idea de podernos asear y tomar un bocado antes de zarpar. Todavía teníamos por delante la navegación de salida por el Eyjafjörður.

Algunos vínculos útiles:
En https://depuertoenpuerto.com/crucero-trasatlantico/ se puede ver el itinerario completo de nuestro crucero trasatlántico.

El blog Los viajes de Wircky tiene una larga entrada sobre la ciudad: http://wircky.com/paseo-por-akureyri/.

También se puede encontrar información práctica en la web Guía de Islandia (https://www.guiadeislandia.es/akureyri/) o en El Blog de Viajes (https://elblogdeviajes.com/islandia/que-ver-y-que-hacer-en-akureyri/).

En inglés, la página oficial de turismo de la ciudad está en http://www.visitakureyri.is/en.

Mas genérica, sobre toda la zona norte de Islandia, pero también interesante, la página https://www.northiceland.is/en.