Salvo que conozcas medianamente Islandia, el nombre de Haukadalur no te dirá nada. Puede que te suene algo más Strokkur, o que Geysir te resulte relativamente familiar. Una palabra muy parecida a géiser. El término utilizado en numerosas lenguas del planeta para referirse al fenómeno geotermal, tiene su origen en Geysir. El primer géiser conocido en Europa. Aunque, en la actualidad, puedan pasar décadas entre sus espectaculares erupciones. En cambio, Strokkur muestra una increíble regularidad, perfecta para una atracción turística. Ambos se sitúan en el valle de Haukadalur. Uno de los tres lugares emblemáticos del Círculo Dorado.

Salón frente a Haukadalur en el Hotel Geysir

Salón frente a Haukadalur en el Hotel Geysir.

El resultado es una de las zonas más urbanizadas del interior de Islandia. Con hoteles, aparcamientos, campings y tiendas de recuerdos. Como casi todo en esta vida tiene su cara y su cruz, su misma urbanización hace que sea una buena base desde la que moverse por el suroeste de la isla. Cuando la erupción en Litli-Hrutur trastocó nuestro plan A para el verano de 2023, el hotel Geysir parecía una forma de intentar nadar y guardar la ropa. Un buen plan B. Podríamos utilizarlo como base desde la que hacer excursiones interesantes, eligiendo entre el este y el oeste en función de la actividad volcánica y del clima imperante en cada momento y lugar. El flujo de lava se detuvo tan solo cinco días antes de nuestra llegada. Al final, tendríamos más tiempo del previsto para pasear por el extraño entorno de Haukadalur. Tocaba improvisar un plan C.

En Strokkur con la cámara.

La indudable estrella de Haukadalur es Strokkur. Fotografiar y grabar el géiser de diversas formas y en circunstancias cambiantes se convirtió en una rutina durante los días que pasamos en el hotel Geysir. Dormir a escasos metros del géiser nos permitía visitarlo en momentos poco frecuentados. Sobre todo, a primera hora de la mañana.
En lo referente a Strokkur, nuestras visitas vespertinas acabaron siendo las menos interesantes. En todas las ocasiones, la luz de la tarde parecía empeñada en no acompañarnos. En lugar de centrarnos en fotografiar Strokkur, aprovechamos para dar tranquilos paseos por su entorno. Aunque Haukadalur podría ser una de las zonas más fascinantes de Islandia, su propia fama y el excesivo grado de urbanización consiguen privarlo de esa salvaje belleza primigenia que, para mí, forma parte de la esencia de la Tierra de Hielo. Lo cual no quiere decir que sea un área falta de interés. En pocos lugares del planeta se puede observar una acumulación similar del fenómenos geotermales.

Blesi

Blesi.

La última tarde que pasamos en Haukadalur acabó siendo la más agradable de todas. En contra de lo habitual, regresamos al hotel pronto, limpios y descansados, aunque la luz seguía siendo tan insípida como durante las dos tardes anteriores. Decidimos olvidarnos de Strokkur y dar un tranquilo paseo entre el resto de lugares fascinantes, que tienden a ser eclipsados por la espectacularidad de géiser. Como Blesi, la extraña charca que parece invitar a zambullirte en sus aguas increíblemente plácidas y transparentes. No sería una buena idea, pues el agua de Blesi mana directamente de un terreno que, en su superficie, alcanza los 80ºC de temperatura. Al norte de Blesi encontrarás otra charca, cuyas aguas azuladas proceden de ésta. Aquí el agua está algo más fría, tras estar expuesta a la atmósfera de Islandia. Aun así, su temperatura ronda los 40ºC.

Junto a Geysir

Junto a Geysir.

Al final, terminamos junto al venerable Geysir. Se estima su edad en al menos un centenar de siglos, aunque la primera referencia histórica que nos ha llegado de los fenómenos geotermales en Haukadalur sea de 1294, en la obra Oddaverja annáll. El nombre Geysir se utiliza por primera vez, al menos de forma escrita, en el siglo XVIII. El término fue adoptado rápidamente para nombrar un fenómeno que era completamente desconocido para la Europa de la época. Hay constancia de que alcanzó los 170 metros en 1845. Al año siguiente, un químico alemán lo estudió y, por primera vez, dio una explicación a su funcionamiento. Geysir se convirtió en una atracción turística, aunque sus erupciones comenzaran a disminuir en frecuencia.

Geysir en 1834

Geysir en 1834, por Friedrich Theodore Kloss (dominio público).

Hay quien dice que pudo ser por culpa de cierto tipo de turistas, que se dedicaban a arrojar piedras y otros objetos al interior del géiser. Quizá fue provocado por algún cambio en la forma o temperatura de los invisibles conductos subterráneos que alimentan el fenómeno. O ser consecuencia del crecimiento natural de la charca, provocado por la acumulación de silicatos en su borde. En 1910 se activaba cada 30 minutos. Cinco años más tarde, podían pasar hasta seis horas entre dos erupciones. Éstas cesaron en 1916. En 1935 y otra vez en 1981, se excavó un canal en el borde de su charca, buscando disminuir el volumen de agua embalsada. Tuvo cierto efecto, aunque el canal se volvió a taponar de forma natural.  Un terremoto en el año 2000 reactivó el géiser, que alcanzó los 122 metros de altura durante un par de días. Después, tanto la frecuencia como la magnitud de las erupciones descendieron rápidamente. Permanece dormido desde 2016.

Erupción en Litli Geysir

Erupción en Litli Geysir (dominio público).

En la actualidad, es normal escuchar que Strokkur es el único géiser regularmente activo en toda Islandia. Aunque sea aventurado afirmarlo rotundamente, pues la definición de géiser no deja de ser ambigua. En el mismo Haukadalur, encontraremos otra fuente hidrotermal, creando continuas «microerupciones». ¿Podemos clasificar Litli Geysir como un géiser, aunque su tamaño sea minúsculo? Incluso hay algunas fotos, tomadas alrededor de 1900, mostrando erupciones de cierta envergadura. También hay constancia de que, en el siglo XIX, las erupciones del cercano Óþerrishola alcanzaban los 10 metros de altura. Aunque ambos parecen haber seguido los pasos de Geysir, los tiempos geológicos son tan distintos de los nuestros, que es complicado afirmar que no sigan activos.

Charca en Hveravellir

Hveravellir.

En otras zonas de Islandia, también parece ser un fenómeno en retroceso. En algunos casos, como Hveragerði, puede deberse al uso intensivo de la energía geotérmica, que quizá drene en exceso el calor del terreno circundante. Resulta más complicado explicar el caso de Hveravellir, en las Tierras Altas. Aquí también podemos encontrar géiseres diminutos, cuya actividad parece haber disminuido desde las primeras referencias que nos han llegado, del siglo XIX.

Un día tranquilo en Gunnuhver

Un día tranquilo en Gunnuhver.

Por contra Gunnuhver, en Reykjanes, parece estar cada vez más activo. El antiguo volcán de lodo se está convirtiendo lentamente en un géiser. De continuar el proceso, pronto podría ser el mas activo de la isla. Aunque tampoco deberíamos olvidarnos de Gámur. Un géiser muy poco conocido, ubicado en las inmediaciones de Kverkfjöll, una de las zonas más remotas e inaccesibles de las Tierras Altas septentrionales.

La última mañana, antes de marcharnos de Haukadalur, aún tuvimos tiempo de dar un último paseo hasta Strokkur. Quería grabar una erupción a cámara lenta. Buscando una luz adecuada, no fuimos demasiado pronto. Serían aproximadamente las ocho y media de la mañana cuando quisimos llegar junto al géiser. Aunque, contra todo pronóstico, encontramos el lugar casi vacío, no estuvimos mucho tiempo. Al quinto intento, pude grabar una infrecuente erupción doble, que superaba mis mejores expectativas. Fue una hermosa forma de despedirnos del valle de los géiseres.

Para ampliar la información.

En https://depuertoenpuerto.com/dos-paseos-por-haukadalur/ se puede ver la entrada de nuestra primera estancia en Haukadalur.

Mi vista invernal está en https://depuertoenpuerto.com/haukadalur-en-invierno/.

Si estás interesado en otras zonas geotermales de Islandia, en https://depuertoenpuerto.com/hveravellir/ puedes ver un recorrido por Hveravellir. En https://depuertoenpuerto.com/invierno-en-hveragerdi/ encontrarás un recorrido invernal por Hveragerði. Mi primera visita a Gunnuhver está en https://depuertoenpuerto.com/gunnuhver/.

En inglés, la web Volcanic Springs tiene una guía muy completa sobre los géiseres de Islandia: http://www.volcanic-springs.com/index.php?section=Iceland&icelandsection=geysers.

También es interesante el artículo de Our Breathing Planet, más centrado en Haukadalur: https://www.ourbreathingplanet.com/haukadalur-geothermal-area/.