Filopapos, que también es conocida como Colina de las Musas, tiene una altura de 147 metros, estando en buena parte cubierta por un tupido bosque de pino mediterráneo. Su posición prominente, cerca de la Acrópolis, la hizo tener gran importancia militar desde la antigüedad clásica, cuando formaba parte del perímetro defensivo de Atenas, hasta la edad moderna. Quizá en ella estuvo apostado el cañón veneciano que, en la noche del 26 al 27 de septiembre de 1687, hizo blanco en el polvorín situado por los otomanos en el Partenón, destruyendo en segundos un edificio que había sobrevivido a dos mil años de guerras y terremotos.
Antes y después del hermoso atardecer, aprovechamos para ver el mausoleo, o lo poco que queda de el. Fue erigido tras la muerte en el 116 de nuestra era de Gaius Julius Antiochus Epiphanes Philopappos, un príncipe helenístico de la Armenia histórica (mas grande que la actual), considerado gran benefactor de Atenas. Parece que el monumento se mantuvo en buen estado hasta el siglo XV, para después comenzar un rápido deterioro, víctima del vandalismo y los elementos. Algunas de sus piedras fueron utilizadas durante el periodo otomano para levantar el minarete del Partenón, cuando éste era una mezquita. Lo único que ha llegado a nuestros días es parte de la fachada curva que da a la Acrópolis, restaurada en 1899 y actualmente protegida por una antiestética valla metálica.
La colina tiene algún otro punto de interés, como la Prisión de Sócrates, un conjunto de cuevas que, pese a su nombre, parece no guardar ninguna relación con el encarcelamiento y ejecución del filósofo. Aunque si tuvieron un papel importante durante la ocupación alemana, cuando fueron utilizadas para esconder piezas de la Acrópolis y del Museo Arqueológico Nacional. En cualquier caso, cuando quisimos bajar de la colina era noche cerrada y la zona estaba bastante mal iluminada. También pasamos junto a la iglesia de Agios Dimitrios Loumbardiaris, de origen bizantino, aunque muy restaurada a mediados del siglo XX. Que nos encontramos cerrada. Mientras descendíamos hacia la calle Apostolou Pavlou, nos tuvimos que «conformar» con la impactante vista de los Propileos iluminados, destacando sobre la noche de Atenas.
En el blog Escribe Cuando Llegues hay una larga entrada sobre la colina: https://escribecuandollegues.com/colina-de-filopapo/.
También es interesante la reseña en 101 lugares increíbles: https://101lugaresincreibles.com/2021/10/el-mejor-mirador-del-atardecer-a-la-acropolis-de-atenas-colina-filopapo.html.
En inglés, The Athens Key tiene una página sobre el monumento: https://www.athenskey.com/philopappos-hill.html.
La página de la Wikipedia sobre el monumento está en https://en.wikipedia.org/wiki/Philopappos_Monument.