Zarpamos del muelle de Harbour Drive, en San Juan de Terranova, sobre las 20:20, un poco antes de la hora prevista. El sol, cada vez más cercano al horizonte, comenzaba a teñir de tonos dorados los barcos atracados en el puerto pesquero, justo frente a nosotros. La hora a la que zarpábamos y la costa que teníamos que recorrer apuntaban a una hermosa navegación coincidiendo con el atardecer.

Para salir a mar abierto teníamos que volver a atravesar The Narrows, el estrecho canal que comunica el puerto natural de San Juan con el océano. Lo habíamos recorrido dos veces por la mañana, ambas en sentido este – oeste. Primero, cuando habíamos llegado a puerto y, posteriormente, durante el paseo por la ruta de North Head, que discurre por la orilla septentrional del canal. Era, por tanto, un paisaje de algún modo familiar, lo que en absoluto le quitaba atractivo. Para esta ocasión, elegimos una de las cubiertas de popa. Suelen ser más tranquilas y protegen del viento aparente que suele provocar un barco al navegar. Además, nos permitiría disfrutar mejor del prometedor atardecer.

Faro de Fort Amherst

Faro de Fort Amherst.

Tras atravesar The Narrows, llegamos al Atlántico y el MS Rotterdam viró levemente hacia estribor, enfilando rumbo ESE. Una tenue neblina, resultado del incesante batir de las olas, envolvía los acantilados de South Head, más allá del faro de Fort Amherst, dándoles un aspecto un tanto fantasmal. Al otro lado de The Narrows, Cabot Tower se recortaba contra las nubes, teñidas de tonos dorados. En la cima de Signal Hill, a ambos lados de la torre, se distinguían perfectamente las siluetas de las numerosas personas que habían subido a ver la puesta de sol.

Atardecer sobre Signal Hill

Atardecer sobre Signal Hill.

Desde mar abierto, más allá de The Narrows podíamos ver las luces de San Juan, que se iban encendiendo una tras otra según avanzaba la oscuridad. Frente a la amura de estribor, brillaba intermitentemente una luz, a la que nos acercábamos lentamente. Era el faro de cabo Spear. La misma neblina que habíamos visto frente a South Head parecía cubrir toda la costa de horizonte a horizonte. Cuando llegamos a la altura del cabo, todo apuntaba a que el atardecer iba a ser bonito, pero poco más.

El faro de cabo Spear.
Faro de cabo Spear

Faro de cabo Spear.

El cabo Spear es el extremo oriental de la isla de Terranova y, por tanto, de todo Canadá. Hay quien dice que es el punto más al este de Norteamérica, olvidando que está ubicado en una isla. Si tenemos solo en cuenta el continente, su extremo oriental sería el cabo St. Charles, en la península del Labrador. Pero si además consideramos las islas, sería el cabo Nordostrundingen, en el noreste de Groenlandia.

En cualquier caso, no cabe la menor duda de que el faro de cabo Spear es el situado más al este de Canadá. El primer faro data de 1836 y es, por tanto, el segundo más antiguo de Terranova, solo superado por el faro de Fort Amherst, de 1813. Pero, al contrario que en éste último, en cabo Spear aún se conserva el edificio original. Pese a haber sufrido varias reformas a lo largo de su dilatada existencia, sigue dominando el paisaje desde el punto más elevado de la colina. En 1955 se edificó un nuevo faro de hormigón, que es el actualmente operativo. Desde 1962, el antiguo faro está incluido en la lista de lugares históricos de Canadá.

Atardecer frente al cabo Spear

Atardecer frente al cabo Spear.

Y de repente, todo cambió. Comenzó con un débil resplandor rojizo cerca del horizonte, al este de Cuckold Head. En solo un par de minutos, el resplandor se había extendido a todo el cielo, teñido ahora de un suave tono entre rosa y anaranjado, que se reflejaba en el mar. El espectáculo era realmente hermoso, pero aún no había acabado. El color rojizo del cielo se hizo más intenso por momentos hasta que, en otros tres o cuatro minutos, alcanzó su clímax. Las nubes, el agua, la cada vez más difusa linea de costa y hasta la neblina que la envolvía adoptaron diversos tonos que iban desde el naranja hasta el granate. A lo lejos, todavía podíamos ver las luces titilantes de San Juan. Más cerca, el faro nos enviaba sus ráfagas con una cadencia uniforme. Navegábamos en medio de un mar de sangre, hipnotizados por un atardecer tan asombroso como inesperado.

Crepúsculo frente a Terranova

Crepúsculo frente a Terranova.

Pero ya estábamos lejos del Ártico y sus interminables crepúsculos. El increíble resplandor rojizo se fue tan rápido como vino, en poco más de cinco minutos. Sobrecogidos por el espectáculo que habíamos contemplado, no pudimos evitar quedarnos un rato en cubierta, viendo como el mundo recuperaba la normalidad, mientras lentamente la costa de Terranova y el faro de cabo Spear iban quedando atrás.

Algunos vínculos útiles:
En https://depuertoenpuerto.com/crucero-trasatlantico/ está el itinerario completo de nuestro crucero trasatlántico.

Se puede encontrar un post sobre la batería costera en el blog Destino Infinito: https://destinoinfinito.com/bateria-cabo-spear/.

En inglés, la web oficial de turismo de la provincia de Terranova y Labrador tiene una página dedicada al faro: https://www.newfoundlandlabrador.com/trip-ideas/travel-stories/explore-cape-spear-and-petty-harbour.

La página oficial del faro se puede encontrar en https://www.pc.gc.ca/en/lhn-nhs/nl/spear.

El blog Hiking with Barry contiene una entrada tan larga como descriptiva: http://hikingwithbarry.com/2012/10/02/cape-spear-st-johns-hiking-newfoundland.